Hoy en día la necesidad de un reavivamiento y una reforma personal en el mundo cristiano es de vital importancia. Es necesario más oración y más dependencia de Dios para el cumplimiento profético descrito en Apocalipsis 14.
Dios dice: “pedid y se os dará, buscad y hallareis…” (Mateo 7:7); y ese es el propósito de CDA, incentivar a los jóvenes y adultos a clamar por el poder prometido a través del Espíritu Santo, a formar un lazo inquebrantable con el Padre, fortaleciendo así a su Iglesia para los últimos momentos de la historia de este mundo.