Gracias a sus grandes áreas verdes, vivir en El Prado significa estar inmerso en un gran parque con áreas de juegos y recreación, es un lugar privilegiado donde a cualquier familia le encantaría vivir una nueva vida con la armonía que caracteriza a la vida campestre en contacto directo con la naturaleza y con un micro-clima único en Lima que solo se encuentra en Los Álamos de Monterrico.