Cristianos Unidos 2.9

Jesús es una persona que siendo Dios (en sustancia) se despojó de si mismo y adoptó forma de hombre para venir a la tierra a cumplir el sacrificio perfecto escrito por los profetas hebreos antiguos, cumpliendo cada una de las profecías del antiguo testamento al pie de la letra, siendo escarnecido e inmolado por causa de nuestros pecados y hecho anatema (maldito) al ser crucificado en un madero, resucitando al tercer día y convirtiéndose así en el Rey de reyes y Señor de señores dándonos la oportunidad de ser salvados por su sangre.
Si confiesas que Jesús es el Señor y crees en todo tu corazón que Dios le levantó de los muertos puedes ser salvo, arrepintiéndote de tus pecados, tomando tu cruz y siguiendo a Jesús.