La empresa surge de la unión entre dos emprendedores en 1995 y un único cliente.
Nace entonces Piqueras y Crespo en los garajes de uno de los socios fundadores, con esfuerzo y un trabajo prácticamente artesanal, fue creciendo y haciéndose nombre dentro del
competitivo mundo de la oficina.
Con la incorporación de la segunda generación en la dirección de la empresa y con una
visión más internacional como objetivo claro, Piqueras y Crespo amplía el abanico de
surtido y aporta soluciones a los office suppliers tanto a nivel nacional como internacional.
Estar cerca de los clientes y sus realidades, escuchar con objetividad y guiarlos en sus
decisiones, al tiempo que garantizar una calidad/precio óptima, es la clave de Piqueras y
Crespo para fidelizar a cada uno de los clientes.