En una sociedad saturada de preocupaciones, “El pájaro azul” nace de dos compañeras de viaje cuyo objetivo es transmitir el positivismo en estado puro mediante el diseño y la fotografía.
El proyecto se basa en el nombre de la película “El pájaro azul”, cuya moraleja final queremos transmitir y con la que aprendemos que la felicidad no se puede forzar. Por ese motivo y porque sabemos que la felicidad no es algo que se encuentre fuera, sino que podemos hallarla en nuestro interior, queremos inmortalizar y poner al alcance de todos aquellos momentos que nos ayudan a descubrirla y convertir cualquier utopía en una realidad.