Queremos que nuestros niños gocen del bienestar, el cual les permita sentirse seguros en el vivir día a día.
En ellos debe prevalecer todo tipo de vivencias sanadoras, que le otorguen bienestar que puedan sentirse seguros y puedan brillar como seres únicos autónomos e independientes.
Que puedan lograr un equilibrio entre su cuerpo, mente, alma.