La peluquería es diseño. Ya sea que se corte el cabello, se lo peine o se haga color. Los estilistas utilizamos creatividad y habilidades técnicas para ofrecer un servicio profesional y creativo al cliente. el estilista es un artista del cabello, y debe aprender el lenguaje básico para luego adaptar sus conocimientos apropiadamente a cada situación, dejando la marca de su estilo personal. El profesional debe sentirse seguro de poder atender a cualquier persona que entre a su salón, ya sea una clienta de avanzada edad que quiere una permanente, o el joven audaz que quiere el último grito de la moda.