Lo que hoy es Olivos, con las corrientes migratorias se fue poblando. Se instalaron varias familias italianas que expresaban su deseo de tener su propia Iglesia.
El 31 de marzo de 1895, se colocó la primera piedra. En 1896, empezaron los trabajos de construcción.
El 6 de enero de 1897, se inauguró la capilla Jesús en el Huerto de los Olivos, en terrenos donados por el administrador del ex Ferrocarril Buenos Aires a Rosario, Hernán Wineberg. Con el tiempo, esta capilla se convertiría en la catedral del municipio y Jesús en el Huerto de los Olivos en su patrono.