Cuenta la leyenda que Gilgamesh era un rey Sumerio mitad hombre y mitad Dios que se negó a morir....
A causa de su carácter soberbio e incluso muchas veces abusivo de su poder, los dioses deciden crear a un guerrero, llamado Enkidu, que posee similares características a Gilgamesh. Ambos rivalizan entre sí, pero terminan haciéndose muy buenos amigos y deciden viajar juntos, comiendo pan y bebiendo cerveza, compartiendo hazañas asombrosas en busca de la inmortalidad.