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José Manuel Estrada 2712, 5800 Río Cuarto, Argentina
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Las prensas de ladrillos de suelo cemento son una eficaz alternativa para el trabajo autosustentable, cooperativo y ecológico.
Tanto en su versión manual como en la hidráulica, las plantillas intercambiables, ofrecen la posibilidad de fabricar 15 tipos diferentes de ladrillos, agrupados en 3 familias, según las distintas necesidades para la construcción.
Las prensas garantizan excelente terminación y acabado del ladrillo, y la comodidad de trasladarlas para poder generar producción en obra, lo que simplifica y abarata los costos.
El ladrillo de suelo cemento tiene innumerable cantidad de beneficios en múltiples aspectos, que lo constituyen una óptima opción para nuestras épocas.
Entre ellas, su aspecto ecológico es de lo más destacable respecto del cuidado del medioambiente, ya que al no necesitar horneado, se prescinde de la tala para generación de combustible y de la contaminación que el mismo horneado produce. También cabe destacar, que aunque su materia prima es la tierra, no es necesaria la tierra fértil.
Respecto a esta materia prima, el hecho de utilizar los recursos del lugar, abarata enormemente los costos de producción, evitando la compra y transporte de otros materiales.
Comparando al ladrillo de suelo cemento con otros ladrillos tradicionales, las ventajas continúan; es mucho más térmico, más acústico y altamente más resistente a la compresión. Desde esta misma perspectiva comparativa, el tiempo de secado, la posibilidad de fabricación en obra, y de acopio, aceleran notablemente los procesos tanto de producción como de construcción.
En lo concerniente a las particularidades de la construcción con ladrillo de suelo cemento, los beneficios redundan tanto en aspectos estéticos, como económicos y temporales. Al fabricarse en molde, los ladrillos son totalmente simétricos, por lo que puede evitarse el uso de revoque grueso. Del mismo modo, para la unión entre los ladrillos no se utiliza el tradicional mortero (mezcla), lo que acelera la construcción. Otra posibilidad, tanto estética como estructural, es la de ocultar las columnas en los orificios de los ladrillos. La supresión del mortero (mezcla tradicional) suprime el tiempo de fraguado necesario entre hileras de ladrillos, por lo que se puede levantar en una misma jornada la altura total de un muro.
El diseño encastrable del ladrillo, brinda, además de la velocidad en la construcción, mayor seguridad de adhesión entre las piezas, evitando posibles desplazamientos e irregularidades.