Instituto Diana Sacayan 3.01

Nosotres habitamos un mundo donde algunas personas tienen privilegios y los usan para dominar y excluir a otros. Sabemos que la educación es la principal herramienta para empezar a mostrar cómo los mecanismos de opresión moldean nuestra ideología y conductas.

Sentimos que abordar la opresión exige confrontar el núcleo patriarcal que nos envuelve. Vemos que el patriarcado, y la heteronormatividad como su aliada, constituyen un núcleo duro que promueve y activa otras formas de supremacía, jerarquía y explotación. No consideramos que el patriarcado sea la única forma de supremacía que opera en todas partes de la misma manera pero si creemos que es una forma universal de opresión que existe en todas las sociedades.

Sabemos que no avanzaremos a menos que empecemos a buscar cambios en nosotros mismos para luego generar cambios sistémicos en la sociedad. Estamos convencidos además que nuestros análisis sociales no sólo deben ser comprensivos de las problemáticas abordadas sino también proveer soluciones.

En este contexto entendemos como una necesidad permanente contar con un espacio de debate y reflexión; creemos además que esa necesidad se ve potenciada en el actual contexto social en el cual desde todos los ámbitos debemos seguir contribuyendo a los logros sociales y a las conquistas en materia de derechos logradas en los últimos años.

Es por eso que sentimos la necesidad de darle vida al Instituto “Diana Sacayan” para abordar temáticas tales como género, diversidad y disidencia sexoafectiva.

Pensamos este Instituto como un espacio multidisciplinar en el que se abordara desde la pluralidad de visiones y a través de distintos métodos las temáticas mencionadas. La investigación, formación, análisis crítico y debate constante serán nuestros pilares y objetivos permanentes. Aspiramos a constituirnos como referente de consulta sobre las áreas de nuestro abordaje.

Entendemos que cuando el conocimiento se colectiviza se logran mejores resultados y la coyuntura actual nos impulsa a poner nuestros conocimientos al servicio de los fines ya mencionados.

Asimismo reconocemos la importancia que para la investigación y estudio tiene la territorialidad de nuestras construcciones y deconstrucciones. Pretendemos y aspiramos con todos los medios que estén a nuestro alcance el lograr el permanente intercambio con la sociedad desde la cual intervenimos. Nos constituimos como un espacio académico abierto que funcione en una retroalimentación permanente con la sociedad que habitamos.

Sabemos que teoría y praxis son inescindibles y desde allí consideramos que es nuestra responsabilidad social aportar al fortalecimiento de las mismas.

Nos posicionamos tomando como uno de nuestros marcos teóricos las ideas y las luchas del feminismo. Consideramos que no podemos avanzar sin previamente cuestionarnos nuestros privilegios. Será una meta permanente el redefinir este sustento teórico para avanzar en la concreción de tal fin.
No desconocemos los espacios ya existentes y las luchas sociales en curso iniciadas por otros movimientos y organizaciones sociales, pretendemos sumar un espacio más que acompañe las mismas. Sabemos que la lucha es colectiva y que aunar esfuerzos nos permitirá llevar a cabo acciones de incidencia, trabajo en redes y el desarrollo de capacidades de actores políticos y sociales.

Por todo lo expuesto entendemos que es muy necesario contar con un espacio que tenga un abordaje especifico de las temáticas mencionadas y esperamos aportar desde nuestro lugar de académic*s, militantes y activistas a incidir en la defensa y a promover la exigibilidad de los derechos humanos.