Bomberos Voluntarios Etruria 3.51

Era el año 1984...

Recién nacía la democracia, en nuestro pueblo gobernaba el Ing. Ag. Sergio Mario Russo. En la plataforma radical de las elecciones de 1983 se prometía apoyo a la creación de un Cuerpo de Bomberos. Éste fue creado el 31 de enero de 1984, ese día, en el edificio de la Municipalidad, se eligió la primera comisión directiva y se anotaron también los primeros voluntarios del Cuerpo Activo. Hubo reuniones anteriores, pero en la fecha mencionada se integró esta comisión: Presidente, José Miguel Gerbaudo; Vicepresidente: Marcelo Cattáneo; Secretario, Juan Luis Martinetto; Prosecretario, Pedro Lagassa; Tesorero, Oscar del Moro; Protesorero, Eugenio Bernardi. Vocales Titulares: Rodolfo Del Zotto, Enrique Landa, José Marconi y Sirio Conti. Vocales Suplentes: Aldo Barbetta, Enrique Bizzarri, Daniel Pellegrino y Leonel Galleano. Comisión Revisora de Cuentas: Néstor Carezzana y Jorge Bernardi. Médico Asesor: Dr. Francisco A. Ruíz. Otros colaboradores firmaron el libro de asistencias en las primeras reuniones organizativas: Marta Signorile de Andrés, Rafael Giraudo, Daniel Barbiani, Antonio Pontecorvo, María Libertad Pac (asesora legal), Aurelio Mariscal y el ya nombrado intendente Russo.

Primeros nombres del Cuerpo Activo

El diario Noticias de Villa María publicaba en su edición del 14 de marzo de 1984 declaraciones del Sr. José Miguel Gerbaudo. Allí explicaba que la iniciativa nació como consecuencia de los trámites cumplidos para conseguir una ambulancia para atender las necesidades de la población, desembocando en la conjunción de esfuerzos para la creación de la Sociedad de Bomberos Voluntarios.
En todo ser humano se inculca el hábito de la solidaridad, del bien común. Los primeros integrantes del Cuerpo Activo (por orden alfabético) fueron las siguientes personas: Acevedo, Pascual; Albarracín, Humberto; Barbero, Odilfo; Barbetta, Rubén; Barroso, Héctor; Bernardi, Alberto; Bernardi, Edelmiro Pedro; Bertone, Gerardo; Blanch, Raúl; Blanch, Juan Carlos; Bodart, Hugo; Brossard, Carlos; Cavallo, Gerardo; Contreras, Néstor; Leyba, Rubén; Loprestti, Ricardo; Márquez, Sergio; Molina, Hugo; Oietto, Jorge; Panero, Mario; Pelaye, Jesús; Regis, Juan Carlos; Suárez, Daniel; Suárez, Sergio; Viera, Gerardo y Viera, Claudio. El servicio de enfermería lo cubría la señora Edith Lambertti de Ríos.

Apoyo logístico de Santa Eufemia y La Carlota

En una de las primeras reuniones se recibió la visita de integrantes de la comisión directiva del Cuerpo de Bomberos de Santa Eufemia, su presidente Daniel Santa y primer vocal Néstor Barufaldi, acompañados por el Jefe del Cuerpo Activo, Elpidio Llorente, y el bombero Claudio Negro, quienes prestaron asesoramiento. Es de destacar que de aquí en más el entrenamiento práctico para el Cuerpo Activo se cumplía en Santa Eufemia, mientras que en La Carlota se recababa asesoramiento y capacitación técnico-teórica. A partir de allí se procedió a la inscripción de la entidad en la Federación de Bomberos Voluntarios de la Provincia de Córdoba, a la vez que se inició una intensa campaña de socios.
“La nueva entidad, que viene a llenar una sentida necesidad de Etruria, está funcionando en el edificio del viejo colegio secundario, institución privada que ha cedido sin cargo alguno sus instalaciones para el funcionamiento del cuartel” (diario Noticias, anteriormente mencionado).

El primer cuartel y el primer jefe del Cuerpo Activo

El primer edificio con que contó el Cuerpo de Bomberos estaba situado en Ignacio Elorza y Luis Schierano, el amoblamiento constaba de un escritorio, dos mesas, catorce sillas, un sillón de mimbre, una mesita y dos cocinas a gas. Otros elementos eran diez cascos reglamentarios, incluido el de color blanco para el jefe. Ésta fue la primera adquisición que se efectuó a $a 1.000 por unidad. El primer jefe elegido por Comisión Directiva fue el señor Rubén Leyba, y como segundo jefe fue elegido el bombero Odilfo Barbero. El 2 de agosto de 1984 se hizo entrega de los primeros uniformes a once integrantes del Cuerpo Activo. Consistía el mismo en pantalón, camisa, ambos de color naranja fuerte, incluido un par de botas negras. Por ese entonces integraban el Cuerpo Activo diecisiete personas de las primeras veintiocho anotadas al comienzo. Entre las primeras existencias junto al moblaje, se podía contar también las diez balizas y ocho chicotes, un comienzo verdaderamente humilde.

Los primeros pasos

Habían comenzado las primeras salidas por siniestro, se viajaba a distintas localidades con el fin de asistir a prácticas o enseñanzas teóricas, eran tiempos en que se recibían donaciones de particulares que veían en el accionar de la novel institución un valioso aporte a la comunidad y, como tal, recibía y sigue recibiendo apoyo moral y material.
Para recaudar fondos se organizaron carreras de motociclismo en un circuito construido en un campo cedido para tal fin por don Antonio Rodríguez, por lo que se lo denominó Circuito "Don Antonio" en agradecimiento a su persona. Las sumas recaudadas mediante estos espectáculos se iban aplicando a gastos del cuartel y compra del equipo faltante.

Instalación de sirena

En noviembre de 1984 se efectuó la compra de una camioneta marca Ford F-100, modelo 1965, y el 31 de diciembre de dicho año se inauguró la “llamada de sirena”, ubicándose ésta sobre el edificio de departamentos de Galería Soria. Anunciando por primera vez el nuevo año, estaban presentes los señores Pedro Lagassa y Aurelio Mariscal por la comisión directiva, y por el Cuerpo Activo, Rubén Leyba, Claudio Viera, Sergio Márquez, Carlos Regis y Néstor Contreras. Era la culminación de un año con resultados muy positivos.

Actividad automovilística

Acondicionado el circuito “Don Antonio” para pruebas de automovilismo, éste se inauguró el 24 de noviembre de 1985. Se organizaron varias competencias con significativo éxito. El terreno donde estaba el circuito fue vendido por don Antonio Rodríguez al señor Albino Mellano, quien lo cede también al Cuerpo de Bomberos para que siga organizando carreras de karting, motociclismo y autos.

Otorgan personería jurídica a la institución

Corría 1986, el 3 de abril llegó la tan ansiada y reclamada personería jurídica, importante elemento con el que se podría llamar a asamblea general ordinaria. La primera comisión directiva, como el Cuerpo Activo, habían dado todo de sí mismos por el avance de esta institución de bien público. Con vistas a la construcción del edificio propio, para recaudar fondos se efectuó la campaña del sobre y se comenzó a solicitar en donación bolsas de portland.
Con la significativa presencia del entonces vicepresidente de la república, Dr. Víctor Martínez, el día 17 de mayo se colocó la piedra fundamental del nuevo cuartel. Ese día Etruria festejaba el 93° aniversario de la fundación de la colonia.
Es primordial decir que en el Cuerpo Activo se iban incorporando nuevas personas, incluso algunos en carácter de cadetes, mientras se iban renovando los equipos naranjas completos, conjuntamente con otros elementos que componen el vestuario del bombero voluntario.

Nueva comisión directiva

La primera comisión que dio impulso para que el Cuerpo de Bomberos fuera una realidad, que no retrocedió ante obstáculo alguno, dio por finalizada su tarea el día 22 de agosto de 1986 y siempre contó con la presidencia del señor José Miguel Gerbaudo.
El mencionado día asumen los señores Ronald Taverna como presidente, lo acompañan Eugenio Bernardi (vicepresidente), Oscar B. Nicola (secretario), Omar Gizzi (prosecretario), Carlos Mariani (tesorero), Eduardo Gramaglia (protesorero). Vocales titulares: Aldo Pellegrini, Pedro Lagassa, Ronald Bufarini, Odilfo Barbero y Jorge Bernardi. Vocales suplentes: Miguel Aragón, Miguel Meyer, Desiderio Venegas y Alberto Bogino. Comisión Revisora de Cuentas: Luis Bernardi, Pedro Peresutti, Miguel Falco y Jorge Falco.
Integrando el Cuerpo Activo estaban las siguientes personas: Edelmiro Bernardi (Jefe), Rubén Leyba (Subjefe), Gerardo Cavallo, Néstor Fabián Contreras, Rubén Barbetta, Carlos Regis, Marcelo Molina, Hugo Molina, Néstor Fabián Coronel, Ricardo Loprestti, Víctor Rivera, Sergio Márquez, Miguel Rivero, Luis Savel Brossard, Rubén Molina y Marcelo Ferrero. A todas estas personas les estaba reservado el deber de construir el nuevo edificio.

Bomberos en sociedad

Por esta época el viejo cuartel era visitado por niños de los jardines de infantes de los centros educativos “Malvinas Argentinas” y “12 de Octubre”, se asistía normalmente a las reuniones de la Regional N° 10 y se cumplimentaba con todas las disposiciones reglamentarias. El señor Carlos Merlo era presidente de la Federación de Bomberos Voluntarios, Héctor Ferrarese (de La Carlota) su vicepresidente segundo representando a la Regional a la que pertenece Etruria. Y así finalizaba el año 1986 cumpliendo su cometido

Se construye el nuevo Cuartel
Ya en enero de 1987 se levantan las columnas del nuevo cuartel y se marca la nueva pista de motociclismo. Pareciera que Bomberos Voluntarios y el deporte motor estuvieran ligados desde el comienzo, por otra parte, esos espectáculos le arrojaban beneficio pecuniario que se invertía en construcción y dotaba al Cuerpo Activo de lo que el mismo requería.
En el mes de junio ya se techaba el nuevo edificio, mientras desde el Gobierno Nacional se recibían donaciones, cuánto más del pueblo y colonia en general. Incluso se organizaban bailes gratuitos en el novel Polideportivo trayendo mesas y sillas desde la escuela rural “Juan José Castelli”, de Colonia Torino.
Finalizaba 1987, el cuartel se encontraba muy avanzado, ya techado se hablaba de pintarlo de blanco por dentro. La sirena sonó con el advenimiento del nuevo año, estando ya instalada en una torre construida a tal efecto.

Fuente: www.lapaginadetruria.com.ar
Autor: Oscar B. Nicola