Excediendo los límites de la Bahía San Antonio y recorriendo la costas abiertas al norte del Golfo San Matías, podremos descubrir un mar silvestre con inmensas manadas de delfines, diversas aves marinas alimentándose sobre cardúmenes de peces, pingüinos nadando curiosamente junto a lobos marinos y, dependiendo la época de su visita, podrá maravillarse de la majestuosidad de las ballenas a centímetros de sus ojos.